Condena: mínimo 9 años en prisión y máximo de 33.
Simpson fue declarado culpable del secuestro y robo ocurrido en una habitación del hotel y casino Palace Station, Las Vegas, en septiembre de 2007. El ex deportista, de 61 años, se enfrentó también a una condena a cadena perpetua tras ser declarado culpable por un jurado de la ciudad estadounidense de 12 acusaciones de asalto, secuestro y robo con armas letales.